Quién no agradece unas palabras sabias en medio de una dificultad, o un consejo cuando está en una encrucijada, quizá un empujón para concretar proyectos o ideas que tiene rondando por su mente. Son tantas las ocasiones en las que resulta oportuno recibir información como vendida del cielo. Y esto es precisamente lo que logran los refranes.

Los dichos populares se han hecho acreedores de múltiples atributos por sus beneficios, tanto para el que los da, como para quien los recibe. Es una manera eficaz de llegar de forma sutil a todo tipo de público, incluso para acometer temas controversiales como lo es el dinero, la educación, los negocios, la religión, y muchos más.

Es así como podemos hacernos aliados de estas frases tan peculiares que resultan de gran ayuda y utilidad para cada situación que se nos presente. Podemos echar mano de ellos para aconsejar, reprender, alertar, educar, tomar decisiones, explicar, entre otros usos. No obstante, para que sean realmente atinados, hay que analizarlos bien y comprender su respectivo significado.

En Internet hay mucha información sobre los refranes, sin embargo, no siempre se encuentra de manera ordenada y con explicación puntual. Por ello, entre los sitios visitados, nos parece que destaca la siguiente: Refranesysusignificado

En la web antes señalada se encuentran los refranes ordenados alfabéticamente, solo hace falta pinchar la primera letra con la que comienza el proverbio y tendremos un subgrupo que corresponda con ese filtro y seguramente en breve se logra ubicar el que requerimos y hasta ver otros más.

Otra sección interesante de la página es la que está en el home principal. Allí veremos los últimos añadidos, los más vistos y un grupo aleatorio. Si no vas con uno en mente y no sabes por dónde comenzar el estudio de estos valiosos aliados, entonces de esos que aparecen al inicio tienes para escoger.

A continuación se enuncian algunos, bastante interesantes que hemos seleccionado para ti:

“Si caí y me quebré el pie mejor me fue”: parece contradictorio alabar un accidente, pero la verdad es que a veces nos ocurren cosas que nos previenen de otras peores.

“El mejor escribano echa un borrón”: no hay que desanimarse cuando cometemos un error, puesto que es lo más común en los seres humanos, aun cuando se especializan en algo. Lo importante es aprender de esas experiencias para mejorar y evitar incurrir en la misma falla.

“La gran victoria es la que sin sangre se toma”: cuando no se perjudica a los demás y alcanzamos lo que nos proponemos, es cuando podemos jactarnos de decir que triunfamos con una gran victoria.