Es muy importante tener en cuenta que la refrigeración de tu motor dependerá en gran medida de una bomba de agua en buen estado. Para conseguir una bomba de repuesto al mejor precio lo puedes hacer visitando este enlace, porque allí encontrarás siempre los mejores repuestos de segunda mano.

Sin embargo, puede que quieras realizar la reparación por tu cuenta y así ahorrarte el coste de la mano de obra. Por este motivo, el día de hoy te he preparado este post, con algunos consejos que resultarán fundamentales para que puedas conseguir hacerla por tu cuenta.

Pasos para el cambio de bomba de agua

Si quieres llevar tu coche a un taller mecánico, allí se encargarán de todo el proceso y no tendrás que preocuparte por nada en absoluto. Sin embargo, dependiendo de la mano de obra, es una reparación que puede llegar a tener un coste de hasta 1000 euros.

Por otra parte, en un desguace puedes encontrar una bomba de agua por menos de 150 euros, lo que te puede ahorrar mucho dinero. Si te animas a hacer la reparación por tu cuenta, deberás seguir al pie de la letra los siguientes consejos:

Baja la bomba rota

Debes asegurarte de que antes de comenzar el coche esté completamente frío, lo que te permitirá evitar quemaduras con líquido refrigerante. Se recomienda dejar el coche apagado desde la noche anterior, y en la medida de lo posible, siempre será mejor tenerlo elevado para facilitar el drenaje del líquido refrigerante.

Comienza por el drenaje del líquido refrigerante del sistema, y cuando se haya terminado desconecta las mangueras de la bomba. Procede en ese momento a quitar los tornillos de fijación para retirar la bomba de agua del motor, asegurándote de dejar la zona completamente limpia antes de continuar.

Instala la bomba de repuesto

Antes de que instales la bomba de agua de repuesto, debes asegurarte de que el modelo del repuesto que compraste sea el mismo que la que acabas de quitar. En caso afirmativo, debes colocarla en su lugar con los tornillos de fijación y conectar las mangueras como estaban anteriormente.

Asegúrate de que todo quede bien apretado, y rellena el sistema con líquido refrigerante verificando que no exista ningún tipo de fuga. Purga el sistema encendiendo tu vehículo y rellena el faltante de líquido refrigerante. Por último, debes dejar el coche en reposo por lo menos durante 4 horas antes de volver a usarlo y ya estará lista la reparación.